viernes, 6 de noviembre de 2009

EL APRENDIZAJE ES ALGO TRIVIAL

¿El aprendizaje es algo tan trivial que se puede observar y medir con base en unas simples preguntas a propósito de unos contenidos cualesquiera?

En lo personal considero que no, ¿Por qué?, por que, el aprendizaje jamás será trivial y mucho menos se le podrá evaluar con unas simples preguntas. Los docentes debemos estar consientes y saber realmente si el aprendizaje de nuestros alumnos ha sido significativo o no, si cuenta con los lineamientos establecidos por las competencias, si logró que el trabajo del alumno se haya desarrollado en forma individual o en equipos como las competencias sugieren. Considero que existen ciertos factores que determinan una efectiva evaluación tanto del alumno como del docente, así como el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Uno de los puntos que quisiera remarcar es que anteriormente los exámenes eran extremadamente largos y tediosos, y el sólo hecho de que a los alumnos se dijera hay examen, les provocaba molestia, enfado, dolor de cabeza, hasta el grado de bloquear materialmente su capacidad de comprensión que generaba una calificación numéricamente hablando muy baja. Hoy en día hasta la palabra “calificación” ha cambiado por evaluación, por lo tanto, como hemos visto con el paso del tiempo hemos tenido que modificar el método de enseñanza y en vez de debe de aplicar un extenuante examen actualmente estamos evaluando por medio de secuencias didácticas y la interacción del joven con sus conocimientos.
Los jóvenes poseen una creatividad impresionante, un ingenio y un alto grado de deseos de sobresalir de sus compañeros en proyectos que reditúan un ambiente de competencia amigable entre los equipos. Los aprendizajes los ponen en práctica y demuestran avances extraordinarios que son evidentes ante los ojos de cualquier docente, sea su materia u otra aunque no la domine.
Otro de los puntos importantes que es necesario mencionar es que nosotros como docentes también somos evaluados por los alumnos, aunque esta evaluación es más estricta que la que nosotros les proporcionamos a ellos. ¿Por qué? Simplemente porque si reprobó por no tener todos sus trabajos, las tareas diarias, por no realizar sus participaciones en clase, no realizó su carpeta de evidencias o portafolios de evidencia, etc., podemos solicitárselos nuevamente en determinado tiempo y espacio para que renueve su calificación por una acreditaría (aprobatoria), por lo contrario con nuestros jóvenes, si a ellos les caemos mal, si no acreditaron la materia por los problemas mencionados anteriormente, se auto-programa para no aceptar que fue su propia apatía quien lo llevó al fracaso. Por lo tanto, (lo han dicho) “cuando evalúe a tal o cual maestro, ya verá que le pongo”. Es por eso que en sus evaluaciones en diversas ocasiones los docentes salimos un tanto mal ya que dependen del momento o del enojo en contra del docente y no precisamente a su aprendizaje.
Como es bien sabido la responsabilidad del docente es guiar a los alumnos por el largo proceso del estudio, ya que algunos jóvenes piensan que la repetición constante y la memorización son la base del aprendizaje significativo. Aprenden para pasar un examen más no a largo plazo, ya que sólo les interesa el documento aprobatorio. Las circunstancias por las cuales llegan a pasar los que consideramos de más bajo rendimiento, son por su astucia para copiar y además tienen vista de lince. Es envidiable, sin embargo no siempre tendrán esa oportunidad y es lo que no quieren comprender.

Por último para concluir este tema:
Debemos de aplicar las competencias para poder evaluar y que nuestra evaluación sea coherente a los conocimientos que hemos impartido. Los procesos de enseñanza-aprendizaje adquiridos por los alumnos construirán un mejor futuro ya que será a largo plazo y la evaluación será acorde a sus habilidades, destrezas, actitudes y aptitudes, teniendo en cuenta que el docente estará debidamente capacitado para emitir una nota ya sea aprobatoria o reprobatoria.
Saludos, Cristina Felix.

1 comentario:

  1. Hola apreciable Cristy,
    DEfinitivamente concuerdo contigo en lo que señalas en tu publicación y considero al igual que tú que la mayoría de las ocasiones los alumnos evalúan la empatía hacia el maestro y no la función o el desempeño que este tiene en el aula.
    Para no variar tu trabajo es como siempre excelente, saludos y hasta la próxima,
    Tonatiuh

    ResponderEliminar